Le ganaba bien a Banfield con gol de Colazo, pero un error del arquero Lucchetti le sirvió a Ferreyra el 1-1 definitivo. El resultado dejó a los de Falcioni casi sin chances de entrar a la Sudamericana
"Esperá, que una le va a quedar...", la frase, en la platea de La Bombonera, otra vez, como tantas veces, bajó hasta el césped. Y una más siempre le va a quedar a Martín Palermo. Aunque se despidió de su casa, de su gente y el equipo de Julio Falcioni apenas igualó 1-1 ante Banfield, y no fue el Titán, sino Nicolás Colazo, el que marcó el gol. Martín dejó la Bombonera sin el gol y sin el triunfo. Poco importa ya. Se fue Palermo, el máximo goleador de la historia del club, el quinto en la historia del fútbol argentino.
El partido fue chato. Se explica desde las intervenciones del goleador en el juego. A los 7, despejó en el área chica un centro desde la derecha. E hizo recordar a todos que también se tuvo que disfrazar de defensor en mil batallas. Y a los 13 quedó de cara al gol tras una gran combinación con Juan Román Riquelme, ese compañero, el único capaz de opacar la figura del Titán; esa rivalidad que los potenció a ambos. Se abrió de piernas Palermo, recibió Román y lo habilitó para que quede mano a mano. El zurdazo lo tapó el arquero Bologna.
Después Mouche le tiró un centro desde la derecha, y Dos Santos no lo dejó cabecear cómodo. Palermo probó con un zurdazo desde afuera del área a los 31, se fue lejos. Y a los 42 dejó un taco y recibió la falta para levantar al público.
Fue testigo del gol de Colazo, a los 2 del complemento. Mouche tocó para Riquelme, que habilitó a Chávez, que sacó el zurdazo cruzado, que tapó Bologna pero dejó vivo el rebote y que Colazo empujó para el 1-0. Ahí estaba Palermo, para recibir la dedicatoria del zurdo y levantarlo en el festejo, uno más para el Titán.
Pasaron los minutos y el momento final cada vez estaba más cerca. Si hasta lo sacó de la cancha a Clemente Rodríguez, que había quedado sentido tras un choque. Para que no se consuman los minutos, para que no terminara nunca.
Dejó un sabor amargo el empate de Ferreyra, sobre el cierre. El 1-1 quedó estampado y Boca se alejó de la Copa Sudamericana. Después del partido, el delantero de Banfield, también emocionado, reconoció que Palermo era su ídolo, su modelo a seguir.
Al final fue empate y emoción. Después llegaron los reconocimientos y los regalos, y el grito de la gente. Palermo se retiró de la Bombonera, todavía le queda un partido, ante Gimnasia, para superar a Sanfilippo y quedar en solitario como el quinto goleador de la historia del fútbol argentino. Siempre le queda una a Palermo.
Formaciones:
Boca: Cristian Lucchetti; Clemente Rodríguez, Matías Caruzzo, Juan Manuel Insaurralde, Luciano Monzón; Cristian Chávez, Leandro Somoza, Nicolás Colazo; Juan Román Riquelme; Pablo Mouche y Martín Palermo. DT: Julio César Falcioni.
Banfield: Enrique Bologna; Alejandro Delfino, Víctor López, Mauro Dos Santos, Marcelo Bustamante; Marcelo Quinteros, Ariel Rosada, Sebastián Romero, Jonathan Gómez; Diego De Souza; Facundo Ferreyra. DT: Sebastián Méndez.
Cancha: Alberto J. Armando
Árbitro: PT: Alejandro Toia (salió lesionado). ST: Fernando Echenique
Síntesis del partido:
Goles: ST: 2' Nicolás Colazo (BJ), 38' Facundo Ferreyra (B)
Cambios: ST: 14' Gabriel Méndez por Diego De Souza (B), 30' Diego Rivero por Pablo Mouche (BJ), 30' Jorge Achucarro por Jonathan Gómez (B), 41' Maximiliano Bustos por Facundo Ferreyra (B), 41' Ricardo Noir por Nicolás Colazo (BJ)
Amonestaciones: PT: 15' Jonathan Gómez (B), 16' Leandro Somoza (BJ), 25' Juan Manuel Insaurralde (BJ). ST: 35' Sebastián Romero (B), 39' Cristian Lucchetti (BJ)
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