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El Taladro ganaba con gol de Luciano Civelli (PT 17m), pero el Xeneize, que ya acumula dos partidos sin triunfos y hoy tampoco convenció, igualó por intermedio de Martín Palermo (ST 13m). Carlos Ischia preservó a algunos titulares para el choque del martes ante Atlas, en México.
Un Boca con algunos suplentes, con la cabeza en el partido del martes frente a Atlas por la Copa Libertadores, tampoco pudo con Banfield en la Bombonera. El conjunto de Carlos Ischia no convenció, si bien fue de menor a mayor, y sólo sacó un empate 1-1 que lo hizo desperdiciar su chance de treparse a la punta, aunque fuera por un rato.El conjunto de Carlos Ischia careció de ideas para quebrar a la última línea del Taladro: las subidas de los laterales dieron pequeños frutos por izquierda, con la sociedad entre Fabián Monzón y Neri Cardozo pero, sobre todo en la parte inicial, no pudieron abastecer debidamente a Martín Palermo. Y Lucas Castromán ni apareció. Recién en el complemento, con el ingreso de Leandro Gracián por el de Luján, se revitalizaron los circuitos futbolísticos locales y el juego xeneize mostró una mejoría. Sólo que entonces ya iba en desventaja y el impulso no le alcanzó para llegar a la victoria.Unicamente una jugada de Mauro Boselli, quien irrumpió por el medio y remató afuera, fue antecedente del gol de Banfield, a los 17 minutos. Entonces, el siempre desequilibrante Darío Cvitanich avanzó por izquierda, se la entregó a Luciano Civelli y éste remató bajo y mordido al segundo palo.Después, el conjunto de Carlos Ischia quiso ir con mayor ímpetu hacia el arco de la visita, aunque no encontró profundidad. Palermo protagonizó la única clara con una volea alta de sobrepique tras una escapada de Cardozo.El complemento arrancó con otra tónica. Ischia quería dar vuelta el marcador y lo demostraba con sus cambios (también entró Sebastián Battaglia). Cvitanich lo tuvo con un cabezazo que pasó cerca y Gracián con un tiro libre apenas desviado. Y a los 13, llegó la igualdad. Gracián la abrió por derecha para el desborde de Alvaro González, quien envió el centro pasado para que Palermo salte con categoría y cabecee a la red al segundo palo.Después del empate, llegó el monólogo de Boca. Todas sus líneas se adelantaron y se dedicaron a aprovechar los huecos en el planteo de los del Sur, que se dedicaron a implorar que corrieran los segundos. Se lo perdió Palermo en una corrida por izquierda y con un cabezazo alto, Boselli, errático, con una media vuelta sin puntería y Jesús Dátolo cara a cara con el Laucha con un tiro por sobre el travesaño.Al final, la sensación del Xeneize fue que, si se hubiera despertado antes, otra habría sido la historia. Pero se dejó madrugar y lo pagó perdiendo dos puntos en casa y el tren para seguir bien prendido. ¿Valió la pena? El tiempo dirá.
El Taladro ganaba con gol de Luciano Civelli (PT 17m), pero el Xeneize, que ya acumula dos partidos sin triunfos y hoy tampoco convenció, igualó por intermedio de Martín Palermo (ST 13m). Carlos Ischia preservó a algunos titulares para el choque del martes ante Atlas, en México.
Un Boca con algunos suplentes, con la cabeza en el partido del martes frente a Atlas por la Copa Libertadores, tampoco pudo con Banfield en la Bombonera. El conjunto de Carlos Ischia no convenció, si bien fue de menor a mayor, y sólo sacó un empate 1-1 que lo hizo desperdiciar su chance de treparse a la punta, aunque fuera por un rato.El conjunto de Carlos Ischia careció de ideas para quebrar a la última línea del Taladro: las subidas de los laterales dieron pequeños frutos por izquierda, con la sociedad entre Fabián Monzón y Neri Cardozo pero, sobre todo en la parte inicial, no pudieron abastecer debidamente a Martín Palermo. Y Lucas Castromán ni apareció. Recién en el complemento, con el ingreso de Leandro Gracián por el de Luján, se revitalizaron los circuitos futbolísticos locales y el juego xeneize mostró una mejoría. Sólo que entonces ya iba en desventaja y el impulso no le alcanzó para llegar a la victoria.Unicamente una jugada de Mauro Boselli, quien irrumpió por el medio y remató afuera, fue antecedente del gol de Banfield, a los 17 minutos. Entonces, el siempre desequilibrante Darío Cvitanich avanzó por izquierda, se la entregó a Luciano Civelli y éste remató bajo y mordido al segundo palo.Después, el conjunto de Carlos Ischia quiso ir con mayor ímpetu hacia el arco de la visita, aunque no encontró profundidad. Palermo protagonizó la única clara con una volea alta de sobrepique tras una escapada de Cardozo.El complemento arrancó con otra tónica. Ischia quería dar vuelta el marcador y lo demostraba con sus cambios (también entró Sebastián Battaglia). Cvitanich lo tuvo con un cabezazo que pasó cerca y Gracián con un tiro libre apenas desviado. Y a los 13, llegó la igualdad. Gracián la abrió por derecha para el desborde de Alvaro González, quien envió el centro pasado para que Palermo salte con categoría y cabecee a la red al segundo palo.Después del empate, llegó el monólogo de Boca. Todas sus líneas se adelantaron y se dedicaron a aprovechar los huecos en el planteo de los del Sur, que se dedicaron a implorar que corrieran los segundos. Se lo perdió Palermo en una corrida por izquierda y con un cabezazo alto, Boselli, errático, con una media vuelta sin puntería y Jesús Dátolo cara a cara con el Laucha con un tiro por sobre el travesaño.Al final, la sensación del Xeneize fue que, si se hubiera despertado antes, otra habría sido la historia. Pero se dejó madrugar y lo pagó perdiendo dos puntos en casa y el tren para seguir bien prendido. ¿Valió la pena? El tiempo dirá.
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